Higüey, R.D. – El Tribunal Colegiado de La Altagracia condenó este miércoles al pastor Víctor Manuel Kelly a 10 años de prisión, y al autodenominado profeta Robinson Peguero a 5 años de cárcel, tras ser hallados culpables de agredir sexualmente a varios adolescentes pertenecientes a su congregación religiosa, ubicada en el sector Villa Cerro, en Higüey.

Durante el juicio de fondo, la Fiscalía presentó pruebas contundentes que confirmaron los abusos cometidos contra los menores de edad, quienes asistían regularmente a los servicios religiosos dirigidos por ambos acusados.

Este caso ha desatado una fuerte indignación en la comunidad, no solo por la gravedad de los hechos, sino también por las fallas previas del sistema judicial. Y es que el pastor Víctor Manuel Kelly ya había sido condenado anteriormente a cinco años de prisión por abuso sexual de una menor, sentencia que le fue otorgada de forma suspendida, permitiéndole permanecer en libertad. Durante ese tiempo, ninguna autoridad supervisó efectivamente que se mantuviera alejado de niños y adolescentes, lo que facilitó que continuara cometiendo actos similares.

De acuerdo con informaciones obtenidas durante la investigación, Kelly habría dado positivo al Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), lo que añade una capa aún más alarmante al caso.

La sociedad exige ahora que se refuercen los mecanismos de seguimiento judicial y protección a menores, para evitar que este tipo de crímenes sigan ocurriendo bajo el amparo de la negligencia institucional.

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